En las últimas semanas se han relatado grandes secretos que rodearon durante décadas a la familia de Isabel Pantoja y la susodicha herencia del diestro Paquirri.
Desde que Kiko Rivera destapase un supuesto entramado de su madre para esconder los enseres del torero a sus hermanos mayores, y que no le ha permitido disfrutar de Cantora como le gustaría, ni siquiera ante graves problemas económicos, todo ha ido zozobrando hasta llegar a la situación actual.
Los disgustos de Isabel Pantoja que se reflejan en su salud
En el pasado la tonadillera ya tuvo algunos problemas de salud durante su estancia en la cárcel, pero todo había quedado en el pasado hasta hace unos días, pues conforme ha contado la periodista Adriana Dorronsoro para El programa de Ana Rosa, su estado comienza a ser bastante crítico, tanto es así que han telefoneado a los doctores en más de una ocasión.
Es más, en el espacio de Mediaset, se aventuraron a asegurar que:
Su entorno cree que tiene una especie de depresión, lleva días sin salir de su habitación, no quiere comer ni ver a nadie, está medicada y sólo pregunta para saber si Doña Ana está atendida y ya está.
Y es que, desde que el esposo de Irene Rosales relatase todos los pormenores de su escabrosa relación materno filial y tras cerciorar que, su progenitora no se ha comportado adecuadamente en muchas situaciones, sus palabras parecen haberle dolido tanto a la artista que no consigue salir de trance inicial.
Como bien supo entrever Chabelita desde La casa fuerte, Isabel necesita más que nunca un abrazo porque lo está pasando fatal, pero la realidad es que es ella misma con sus actos quién ha provocado que su primogénito llegara a tal extremo provocándola ante los medios de prensa por no darle lo que le pertenecía.
